En la tercera jornada del Campeonato de España de Selecciones Autonómicas (CESA), los equipos vascos M16 y M18 se enfrentaron a un duro reto contra las selecciones valencianas. A pesar de no lograr la victoria, con resultados de 5-21 y 16-28 respectivamente, los y las jóvenes deportistas vascos demostraron una admirable capacidad de adaptación y un espíritu inquebrantable.
El campo de césped natural y las condiciones meteorológicas adversas de las últimas semanas presentaron un escenario poco familiar para los equipos valencianos. Sin embargo, estos factores no impidieron que los equipos vascos desplegaran un juego digno de su tradición deportiva. Los y las M16, aunque comenzaron en desventaja, mostraron destellos de su potencial, manteniendo la esperanza y la lucha hasta el último momento. Por otro lado, los M18 ofrecieron un encuentro más reñido, acercándose peligrosamente en el marcador durante la segunda parte del partido, reflejando la tenacidad que caracteriza a Euskadi.
Este tipo de encuentros son una prueba más de que, en el deporte, la victoria no solo se mide en puntos o posiciones en la clasificación, sino también en la valentía para enfrentar a rivales formidables y en la capacidad de superar las adversidades. Los equipos vascos, con su entrega y pasión, continúan forjando su camino en el CESA, y cada partido es una oportunidad para crecer y fortalecer su identidad deportiva.